La Cámara Federal porteña confirmó los sobreseimientos del ex ministro de Justicia del gobierno de Cambiemos, Germán Garavano; del ex titular del Programa Nacional de Protección a Testigos e Imputados, Francisco Lagos, y del monotributista Alejandro Vandenbroele, quien declaró como “arrepentido” y contribuyó al fallo que condenó al ex vicepresidente Amado Boudou.
Los camaristas Mariano Llorens y Leopoldo Bruglia ratificaron un fallo del juez de primera instancia Julián Ercolini, quien había rechazado sendos pedidos de indagatoria firmados por la fiscal Paloma Ochoa.
La fiscal había reclamado las indagatorias tras advertir incumplimientos por parte de Vandenbroele de sus obligaciones como arrepentido (entre ellas, en una oportunidad se escapó de su custodia y en otra protagonizó un siniestro vial en supuesto estado de ebriedad) y por presunta “administración fraudulenta” en el financiamiento de sus actividades.
Los camaristas consideraron que Lagos actuó en el marco de sus facultades, que Garavano no podía conocer los pormenores del régimen de Vandenbroele y no era él quien administraba el patrimonio del programa, y en consecuencia –al no haber delito- el “arrepentido” no podía haber participado de él.
Ochoa había advertido también que Vandenbroele recibió fondos estatales durante dos años y tres meses cuando el máximo establecido por ley era de seis meses.
Pero el tribunal aceptó esa extensión como una forma de “coadyuvar la situación de las personas que se incorporan al programa, promoviendo y persiguiendo su protección”.
