"Todavía estoy en un proceso de enjuiciamiento, esperando definiciones que probablemente se den a conocer en esta semana -anunción la fiscal-. El enjuiciamiento político que se me está haciendo tiene que ver con la corrupción que hay en la provincia, el juicio y la condena al gobernador Urribarri".
Goyeneche explicó que la intención de este enjuiciamiento político en el que está involucrada es "mantener la sensación de impunidad, esta idea de que a algunas personas no se les llega con la letra de la ley, que algunos están por fuera de la normalidad". Y destacó que cuando eso cambia por algún motivo, como el buen accionar de los jueces que condenaron al gobernador en esta causa, el sistema político reacciona.
"Si cambiara esa sensación de impunidad, investigar los casos de corrupción sería más fácil, los testigos colaborarían con los datos que conocen, la información documental llegaría con más precisión a la fiscalía. Hoy es muy difícil investigar corrupción en Argentina; mucha gente no quiere comprometerse porque tiene esta sensación de que es en vano", destacó Goyeneche.
En relación a las causas por las que Urribarri fue condenado, precisó: "En una de las causas (la denominada Contratos de la Legislatura) se descubrió una organización delictiva cuasi mafiosa, en la que se llevaban ingentes sumas de dinero mensuales: 53 millones de dólares no sólo desviados sino robados. Hablamos de corrupción estructural donde las sustracciones de dinero han sido muy importantes", subrayó.
