“Creo que fue una buena decisión haber abierto el debate en torno a la Ley de Alquileres. Pudimos escuchar a todos los sectores vinculados a un alquiler, propietarios, inquilinos, inmobiliarias, profesionales”.
“Hay diputados y diputadas con proyectos presentados. Hoy, el debate sobre la ley tiene una paleta de colores mucho más diversa de la que tenía antes del arranque de esas cuatro reuniones informativas”.
“Cuando iniciamos este debate, prácticamente se hablaba de la derogación o la suspensión de la Ley de Alquileres. Terminamos el debate y prácticamente ninguno de los expositores terminó planteando ese escenario”.
“Me parece que hemos recargado todas las responsabilidades y culpas de los problemas que tiene la cuestión de los alquileres en esta ley. Uno se encuentra con problemas de alquileres en todos lados”.
“Tuvimos dos decretos, por 180 días cada uno, que prácticamente dejó en stand by el movimiento de los alquileres en Argentina. Hay problemas que vienen de antes”.
Lo mejor que podemos hacer después de tantos aportes es tratar de hacer una decodificación en términos parlamentarios, ver qué temas se pueden o se tienen que modificar y qué otras herramientas legislativas pueden ayudar”.
“Esta es una ley que ha tenido un piso de consenso en la Cámara de Diputados muy alto. Para modificarla, hay que aspirar a un consenso amplio. La ley de Alquileres del año 2019-2020 puso un piso de derechos a los inquilinos”.
“Yo soy de la idea de que una ley de promoción para las viviendas en alquiler puede ser mucho más efectiva que la modificación que algunos ítems”.
“Creo que no tenemos que plantear la unidad del Frente de Todos en tercera persona”.