Malacalza explicó que la situación de Villa tiene la particularidad de incluir denuncias de violencia sexual en el marco de una situación de pareja, algo que no está tan visibilizado como otras problemáticas. "Desde el Ministerio de las Mujeres, lo que nos preocupa es cómo se va incorporando esto dentro de los clubes, en un ámbito que está conformado por varones y que tiene altísimos niveles de masividad y popularidad", destacó.
"Cuando esto se legitima desde los propios clubes, lo que se envía es un mensaje social de tolerancia con respecto a las violencias de género. En estos casos hay una responsabilidad muy fuerte de los clubes y las instituciones", señaló la subsecretaria, y agregó que "lo que ocurre en el ámbito privado no es responsabilidad exclusiva de quienes estuvieron en el ámbito privado"sino que "también hay una responsabilidad de los clubes, las instituciones e incluso del Estado cuando no se pronuncian en contra de estos episodios" de manera clara.
Malacalza subrayó la importancia de que los clubes y las instituciones "manifiesten al menos una declaración de repudio contra las situaciones de violencia de género", ya que los gestos de legitimidad son los que permiten que se siga reproduciendo la violencia a nivel social" y habló sobre la gran resistencia con la que muchas veces se encuentran lxs funcionarixs del área: "En un momento invitamos a las instituciones a sumarse con una bandera contra la violencia de género y muy pocos lo hicieron", contó.
Consultada sobre los dichos de Javier Milei acerca de la eliminación del Ministerio de Mujeres, Género y Diversidades, Malacalza sostuvo: "Estamos en un contexto de mucho rechazo hacia la ampliación de géneros en materia de género y diversidad. Argentina es uno de los países que más ha avanzado con la ley de identidad de género, el matrimonio igualitario o la interrupción del embarazo, pero son estos pequeños gestos de dejar pasar un comentario así los que legitiman que se sigan reproduciendo estos hechos".
