"En el 2006 yo había compuesto una canción titulada 'Sangre aborigen'. Estaba buscando datos sobre mi familia y me encontré con un texto de Vidal Mario que me conmocionó mucho, donde se narraba la masacre de Napalpí. El texto era terrible porque hablaba de orejas y testículos cortados, muerte, orgías de sangre, violaciones, empalamientos", recordó Serrano, quien fue convocado por el Servicio de Reconciliación y Paz (SERPAJ) liderado por Adolfo Pérez Esquivel.
"Veo que hoy sigue existiendo racismo y poca empatía con las comunidades", diagnosticó el músico. Además, informó que actualmente está vigente "un juicio por lesa humanidad que no prescribe nunca, pero también otro de hace 14 años". Detalló que hubo un fallo judicial negativo pero que ahora se apeló a la Corte Suprema de Justicia para que las comunidades puedan recibir "una reparación histórica, un resarcimiento por aquella masacre".
Consultado por el equipo, Serrano contó cómo era el vínculo que tenía con Egidio García, uno de los líderes aborígenes más importantes en el Chaco: "Egidio era una persona muy inteligente. Había sido esclavo de niño, también llegó a ser diputado provincial. Para él su lengua era sagrada, pero por lo general se manejaba con silencios y gestos. Yo aprendí a ponerme detrás de él, nunca adelante. Era una persona que me daba mucha paz".
"Me parece necesario que la gente tenga más empatía con las comunidades", expresó el cantante, y explicó que aunque "algunos hablan de 400 víctimas y otros de miles", lo más importante es "que esto se visibilice y que la gente entienda lo que hicieron los criollos -y me incluyo-, la porquería que podemos llegar a ser".