Carriqueo informó que durante la mañana realizaron una ceremonia frente al lago y desde arriba tiraron gases lacrimógenos. "Lo que está en juego son territorios sagrados donde hay una machi y eso es muy importante para nosotros", explicó.
"El conflicto no es nuevo, tiene 140 años. La incorporación de los territorios de la Patagonia se produjo mucho después de la conformación de la Argentina; antes eran territorios comunitarios habitados por pueblos originarios. Estos conflictos no son actuales sino históricos y el Estado nacional no ha resuelto devolver tierras a pesar de que hicimos juicios y pedimos comisión investigadora".
Con respecto a las causas del actual conflicto, sostuvo: "Fue un proceso genocida con violación, asesinatos, muertes, marcha forzada y esclavitud. Esa es la historia que vivieron nuestros abuelos, pero quizás es la primera vez que muchos escuchan esto. Nosotros tenemos una relación con el territorio".
"Antes no había propiedad privada ni límites. Había caminos ancestrales y la discusión territorial no existía. Que nosotros vinimos a matar a los tehuelches es una falacia y nace como argumento para llevar adelante la Campaña del Desierto. La historia está plagada de mentiras que avalan la violencia. Aquí la educación tendió a la homogeneización de las distintas culturas y esto es un conflicto. Todas las naciones de Latinoamérica tienen conflictos con los pueblos originarios en su interior", reflexionó.
